domingo, 8 de abril de 2012

Un viaje por tierras bálticas

Eh, eh, eh, eh!!! Primicia, pliqueros!!

Por primera vez tras aquel "compás cero" a finales de agosto, nosotros, Traste y Clavijo, nos dirigimos a ustedes conjuntamente. Publicamos a la vez y desde el mismo sitio!! Se trata de un acontecimiento, qué duda cabe, que debemos agradecer a la visita que ha realizado Traste desde el pasado viernes a las tierras bálticas donde Clavijo este año reside.

Más allá de nuestras expectativas, y muy felizmente, nos hemos adentrado en estas culturas que sienten su folk muy a flor de piel, y de las más diversas formas. Tejidos, patrones, escultura, arquitectura, COMIDA, artesanía... y, por supuesto, música. Música que es aquí inseparable del canto popular, de la danza y, en definitiva, de la vida con los demás.



Tras establecer el cuartel general en Tallinn, la bonita capital de Estonia, decidimos hacer una escapadita al pequeño pueblo de Pärnu, donde descubrimos, además de lindos paisajes y una arquitectura muy cuca, la realidad de la aceptación de la música de creación plenamente actual en el día a día del arte. Sin categorizaciones; sin tabúes ni prejuicios. Sin rechazos y sin aspavientos. En armonía con el resto de las artes, como tié que sé.

Tienda Universaal Universum
De vuelta a Tallinn descubrimos, por ejemplo, una colección de instrumentos del mundo en una pequeña tiendecita de la bella Old Town que esconde esta ciudad. Y murallas, y restaurantes chulis... En fin, que tampoco queremos parecer una guía turística ^_^. Pero, el culmen de nuestra experiencia báltica estaba aún por llegar...

En una fantástica excursión a Riga, y gracias a una lugareña (bonita palabra) muy amable, descubrimos (omg) un auténtico folk pub. Tradicional y cotidiano. Muy de ellos. Y allí, para deleite nuestro, una banda de poliinstrumentistas anduvo tocando, y la gente bailando, y nosotros flipando y finalmente danzando, también, al compás del violín, el acordeón, la tuba (¿era una tuba?), las palmas y las panderetas. Una experiencia sublime, en cualquier caso. El buen rollo en forma de risas, y risotto (mmm... risotto...) .

Quedaban ya pocos días para el inevitable final de la aventura, pero, por supuesto, no permitimos que el cansancio nos rindiera. Y así, de vuelta en la capital estonia, descubrimos durante un paseo también un poco de la música tradicional de esta zona. Y de la mano de un grupo muy particular de gaiteros estonios (quizá no el instrumento más tradicional de aquí, pero eso ya lo comentaremos en otra ocasión) interpretando, con mucho arte y un sonido que nos llamó la atención desde el principio.

Se trata de Ro:toro, una banda de lo más singular que interpretan melodías tradicionales estonias con un grupo variado de instrumentos. Su nombre deriva de las palabras estonias para "caña" y "tubo" (en referencia a sus dos gaitas y su saxofón), pero incluye también perlas de la organología moderna, como son la guitarra eléctrica o los tambores de agua. En definitiva, un proyecto que creemos que vale la pena investigar, y una más de las interesantes manifestaciones de este pueblo tan musical. Aquí su web y su página de myspace. ¡Hasta el logo mola!


(el disco en manos de Traste)

Ha sido una aventura trepidante, magnífica, llena de emociones... en fin. Ahora Traste vuelve al sur del sur; Clavijo se queda en el aún frío norte. En cualquier caso, queridos amigos, nos veremos pronto.

Os desean lo mejor,


Traste y Clavijo (together ^_^)


p.s: por cierto, ojo a la retrataúra que ha hecho Traste, a que mola?